Las mejores ideas para decorar el pasillo

Los pasillos pueden ser, en ocasiones, espacio complicados para decorar. Demasiado largos, demasiado estrechos, demasiado anchos o muy oscuros. Nunca “llueve a gusto de todos” y lo cierto es que ningún pasillo suele gustarnos. Pero por suerte siempre hay soluciones que pueden hacer de estos espacios lugares mucho más alegres e integrados en la decoración general de la casa. En este post te enseñaremos las mejores ideas para decorar el pasillo, o al menos te daremos algunas pistas que pueden servirte de inspiración.

Aunque no cueste creerlo, existen muchas cosas que podemos hacer para decorar pasillos. Soluciones como la eliminación de puertas, los colores, las alfombras o la inclusión de algunos muebles para aumentar el espacio de almacenaje son algunas de las alternativas. A continuación te hablamos un poco más acerca de ello.

 

Elimina las puertas para unificar espacios

Sí, las puertas en los pasillos son buenas siempre que separen el mismo de una habitación como el baño o un dormitorio. No obstante, hay otros espacios en los que estas puertas no son imprescindibles. Por ejemplo, en el salón o comedor. Además, si estas estancias son luminosas, al quitar las puertas, lograrás que la luz inunde tu pasillo, haciéndolo mucho más acogedor. Los espacios estarán comunicados y la sensación de apertura será mayor.

 

El color para decorar

Los pasillos también se pueden pintar, claro que sí. No obstante, ten cuidado. Un pasillo demasiado estrecho no se verá bien con colores excesivamente oscuros. En lo posible debemos olvidarnos del negro y también de aquellos colores subidos de tono.

Por otro lado, la pintura o el sofá pueden ayudarnos a disimular un pasillo demasiado estrecho. Olvida las rayas verticales, que sólo aumentan esa sensación angosta y claustrofóbica. En este caso, mejor apostar por las rayas horizontales, las que separan visualmente el suelo del techo. Quizá podrías hacer una división y pintar la parte inferior de un color y la superior dejarla en blanco o en otro color más claro.

Cómo decorar pasillos: la importancia de la luz

La mejor forma de darle luz a un pasillo oscuro, sin posibilidad de ser abierto a otra estancia, es pintarlo de blanco. El blanco ilumina automáticamente las estancias. Pero además, también es recomendable el uso de materiales naturales que aporten un poco la calidez. Una excelente combinación serían los suelos de madera (natural o sintética) y la pared en color blanco. Si lo prefieres, juega con los subtonos del blanco, como el blanco roto. En otro post, al que quizá te interese echar un vistazo, te hablábamos de cómo pintar las paredes de tu dormitorio.

Decorar el pasillo añadiendo espacio de almacenaje

Por muy estrecho que sea tu pasillo, seguro que puedes incluir, aunque solo sea, un zapatero. Son muebles con poca profundidad, que además sirven como superficie extra para dejar tus llaves o cartas. Ahora bien, intenta no dejar desamparado el zapatero. Decora esa pared con un espejo o con algunos cuadros. Sí, los espejos amplían visualmente el espacio, por lo que es un recurso interesante para la decoración de pasillos.

 

Decorar el pasillo a ras de suelo

En los pasillos muy estrechos esto no es posible. Pero si tu pasillo tiene a partir de 80 o 90 cm de ancho, no lo dudes. Puedes colocar objetos en el suelo para decorar. Desde espejos de esos que quedan apoyados en el mismo suelo, pasando por macetas, cestas, farolillos y todo lo que se te ocurra.

 

Razones para elegir ropa de cama blanca y cómo mantenerla perfecta

Una cama acogedora, suave e inmaculada, puede ser la representación perfecta del paraíso en la tierra, al menos para los más dormilones. Y es que la ropa de cama blanca le da al descanso nocturno una nueva dimensión. Te contamos por qué es una gran idea elegirla y cómo lograrás mantenerla perfecta durante mucho tiempo.

Me encanta la ropa de cama blanca. Me parece la forma más elegante, y acogedora a la vez, de vestir la cama y determinar la decoración del dormitorio. Porque la ropa de cama tiene mucho que decir en lo que a este aspecto se refiere. De hecho, elegir las sábanas, la colcha o el edredón es una tarea en la que debemos poner atención. De ello dependerá, en parte, que nuestro descanso sea reparador, placentero y agradable.

Ropa de cama blanca, de ayer, de hoy y de siempre

Hubo un tiempo en el que las sábanas blancas inmaculadas, con sus bordados o sus puntillas, me parecían anticuadas. Eran para mí resquicios de un pasado que no me atraía. En aquellos momentos, yo prefería vestir mi cama de colores más intensos, incluso muy oscuros, porque me resultaba mucho más moderno y especial. Creía que el dormitorio resultaba así más elegante.

Sin embargo, ahora lo que realmente me gusta son las camas blancas como las de antes. Puede ser por la edad, o por el gusto por lo vintage.El caso es que hay pocas cosas tan placenteras que deslizarse entre unas sábanas blancas, limpias, suaves y frescas. Sobre todo, si son de un tejido agradable, de calidad.

Por eso, cuando tengas que renovar tu ropa de cama, plantéate elegir un buen juego de sábanas blancas. Quedarán perfectas en cualquier dormitorio, sea este del estilo que sea.

Cómo cuidarla para que esté siempre perfecta

A la hora de elegir la ropa de cama blanca, hay un requisito fundamental. Es importante que inviertas en calidad. Y es que cuanto mejores sean tus sábanas, más confortables te resultarán y más te durarán. Si lo piensas, a la larga compensa gastarse un poco más de dinero, ya que tendrás mejores sábanas, te durarán más tiempo y te encantará usarlas.

Cuando compres un nuevo juego de sábanas, lávalas antes de usarlas por primera vez. Eso sí, bastará con un lavado ligero y corto con agua fría.

La mejor forma de lavar tu ropa de cama blanca

Puede que te gusten las sábanas de algodón, más resistentes, o que prefieras las de satén o hilo. Sea como sea, acostúmbrate a lavarlas con delicadeza, para conseguir que sufran lo menos posible. Ten en cuenta que los lavados frecuentes son una de las cosas que más estropea los tejidos.

A la hora de lavar las sábanas, elige bien el programa de lavado. Si cambias las sábanas con la frecuencia adecuada (los expertos recomiendan hacerlo una vez a la semana) no estarán demasiado sucias, por lo que podrás optar por un lavado no demasiado largo y en agua fría o a 30 grados.

También es importante que el centrifugado no sea excesivamente largo. Con las lavadoras actuales no hay problema. Podrás elegir el centrifugado que necesites, con más o menos revoluciones y duración. Elegir uno corto y no demasiado fuerte te ayudará a evitar que se arruguen mucho y te costará menos plancharlas. Esto es importante sobre todo si las sábanas son 100% algodón, ya que se arrugan más.

Cuidado con usar productos agresivos

Otra recomendación que has de tener en cuenta para lavar bien tu ropa de cama blanca, es la de no mezclarla en la lavadora con prendas de colores muy intensos u oscuros, ya que estas podrían desteñir y manchar tus sábanas blancas.

A la hora de usar blanqueadores, procura evitar todo tipo de productos químicos que lleven cloro, como la lejía. Resultan muy agresivos y acaban debilitando las fibras de las telas. Mejor opta por blanqueadores ecológicos, que sean biodegradables y que respeten el medio ambiente. Suelen estar formulados a base de ácidos cítricos, alcoholes naturales o percarbonato de sodio. Esta última es una sustancia natural, que no resulta tóxica ni contaminante.

El planchado es importante

Después de lavar convenientemente tu ropa de cama blanca, llega el momento del planchado. Puede que quieras engañarte y decirte a ti mismo que planchar las sábanas no es tan importante. Estás en todo tu derecho, pero no puedo darte la razón.

Planchar las sábanas antes de colocarlas en la cama no es una tarea fácil, pero sí necesaria. Además, la dificultad también depende del tipo de tejido. Tanto el algodón como el hilo o el lino se arrugan bastante.

Para hacerte la tarea más sencilla, elige una buena plancha. O, lo que es mejor, un centro de planchado. Un truco para que resulte más fácil es planchar las sábanas ligeramente húmedas.

En cualquier caso, y aunque plancharlas para dejarlas perfectas sea un poco latoso, merece la pena hacerlo. Lo notarás cuando retires el embozo de tu cama y te metas entre esas sábanas maravillosas. ¡Será una delicia!

Fuente: Decoración 2.0